Muchas veces se habla de que las relaciones sexuales han pasado a ser rutinarias, monótonas, que se ha apagado el fuego, la llama…Aunque para algunos la monotonía puede parecer un estado poco atractivo; con el paso del tiempo, muchas parejas se ven sumidas, inevitablemente, en una rutina sexual derivada por factores como la falta de novedad, el actual ritmo de vida estresante que contribuye al agotamiento físico y emocional y dificulta el tiempo de calidad en pareja, la presencia de los hijos e hijas en casa, entre otras cosas.

Pero, ¿la rutina o monotonía sexual es mala?

De primeras, el término rutina ya recibe una connotación negativa y se le resta que pueda tener una función o sentido para muchas personas. Por ello, es importante decir que la monotonía puede ser positiva para determinadas parejas. Éstas se sienten cómodas y seguras, ya que han pasado por una etapa de adaptación en la que han comunicado sus gustos y deseos más íntimos, han experimentado distintas prácticas, de las cuales algunas han descartado y otras han supuesto un enriquecimiento de su repertorio sexual. Por lo tanto, si estas personas están conformes en permanecer así, les gusta su zona de confort sexual, es genial. Si no, es cuando hay que empezar a moverse, a hacer algo, porque lo que ocurre no es rutina, sino aburrimiento; que es una interpretación negativa de los encuentros eróticos y, por tanto. muy alejados de la satisfacción erótica.

Por eso, hoy os propongo una serie de claves eróticas que despierten vuestra curiosidad y deseo, que os empujen a salir de vuestra zona cómoda y donde descubráis nuevas experiencias.

La primera clave para mejorar la erótica en pareja, consiste en preguntar a nuestra pareja sobre sus apetencias y deseos, y comunicar los propios. No nacemos con el poder de la adivinación, y aunque llevemos mucho tiempo juntos, las fantasías no se mantienen, cambian con el tiempo y las experiencias vividas.

Os propongo un ejercicio:

Dibujad cada uno en un papel una silueta que os represente y marcad en ella las zonas de vuestro cuerpo que más os exciten con una puntuación del 1 al 10. Después intercambiadlos.

A continuación, comentad lo que veáis, preguntad y sobre todo, utilizad ese dibujo como vuestro GPS sexual, para recorrer el mapa erógeno de vuestra pareja. Esto os ayudará a disfrutar de cada centímetro de vuestra piel, a entrenar vuestra comunicación y a practicar el masaje piel con piel.

Además de lo anterior, algo muy importante en la pasión es el cuidado del vínculo. Muchas veces, con el paso del tiempo, se nos olvida conquistar a nuestra pareja, así que hoy vamos aprender a conquistar a nuestra pareja desde el minuto uno. Todos los días deberían ser un primer día de conquista.

¿Cómo hacemos esto?

La conquista se basa en cosas simples. Bailar juntos, desayuno tempranero, dormir desnudos,  vestirse sensualmente para seducirte a ti mismo y a tu pareja.

Cada vez que tu pareja vaya a ducharse, dúchate con ella. Ahorraras agua y serás más ecológico

Por último, otra clave necesaria en el sexo, es aprender que en la cama (o en otros sitios) se debe jugar, desinhibirse, perder el miedo a hacer el ridículo, soltarse la melena y divertirse. Estimular el juego, y así os déis permiso a cumplir vuestras fantasías y deseos.

Algunos ejemplos de juegos eróticos:

Volved a ser adolescentes. Buscad lugares donde os escondíais, mantened relaciones en cualquier lugar, con el morbo de ser descubiertos por alguien. Probad nuevos lugares, creando nuevos recuerdos y momentos juntos. Disfrutando del presente y no os quedéis anclados al pasado.

Secuestra a tu pareja sin avisarla. Con este rapto sin previo aviso, activarás el proceso de morbo, de sorpresa, de fantasía. No es necesario que sea en un cumpleaños o fecha señalada. La fecha especial es hoy que estás juntos. Cada minuto cuenta, no dejas para mañana lo que puedas hacer hoy

Juegos de rol. Haz actuaciones que le gusten a tu pareja, striptease sensuales o graciosos. Improvisa y usa ropa u objetos que tengas por casa.

Pos-it o gincanas sexuales. Dejad mensajes por toda la casa, como por ejemplo: Búscame, no lleve mucha ropa, o escribir mensajes eróticos durante el día.  Con estos, activarás la parte de positivismo, de erótica conjunta, de sorpresa, de romper con el aburrimiento. En definitiva, de tener ganas de llegar a casa.

Cumplir fantasías eróticas. Poner en práctica los deseos de tu pareja o hacer fantasías conjuntas. Os podéis ayudar de literatura o cine erótico que estimulen vuestra imaginación y os den ideas.  Por ejemplo: en la película 9 semanas y media,  intentad reproducir la escena en que el hielo y las gotas que caen se secan con la boca.

Sesión de fotografía erótica. Sesión que nos enseñará a erotizar a la cámara y a nuestra pareja. Además, esta técnica nos ayudará a reforzar la confianza con la pareja para evitar que las fotos se distribuyan o se pueden borrar después.

Prohibir el coito dos veces al mes. Con esta técnica, os forzaréis irremediablemente a recurrir a otras alternativas, para disfrutar de vuestros encuentros eróticos. Podréis jugar a lo que queráis, excepto al coito: masturbación, sexo oral, juego de caricias.  Esto os ayudará a abrir vuestro abanico sexual y a ser más creativos.

 

¿Cuál vas a poner en práctica?

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